Bizcocho:
100 g. de harina
25 g. de cacao puro
una pizca de levadura Royal
125 g. de azúcar
1 cucharada de vainilla líquida
4 huevos "L"
Elaboración:
Batimos las claras a punto de nieve con el azúcar.
Cuando estén bien firmes añadimos las yemas y seguimos batiendo. Añadimos la vainilla.
Por último con ayuda de una espátula o la varilla manual, incorporamos poco a poco y con movimientos envolventes la harina tamizada con la levadura y el cacao.
Vertemos el preparado en un molde aceitado y enharinado y con papel de hornear en el fondo (he utilado uno de 22 cm.
Precalentamos el horno 10 minutos a 200º y horneamos en la parte baja del horno durante 30 minutos a 180º.
Dejamos enfriar sobre una rejilla.
Crema de mantequilla y queso:
300 g. de mantequilla
100 g. de queso crema
150 g. de azúcar glas
una pizca de extracto de vainilla
una cucharilla de cacao puro
Elaboración;
Batimos durante cinco minutos la mantequilla a temperatura ambiente. Añadimos el azúcar glas, el queso, la vainilla, el cacao y seguimos batiendo unos minutos más.
Crema de chocolate para decorar:
200 ml de nata
una cucharada de azúcar glas
una pizca de queso crema (opcional)
una cucharadita de cacao puro
Elaboración:
Batimos la nata y sin terminar de montar añadimos el azúcar y el queso. Seguimos batiendo hasta que quede bien firme. Añadimos el cacao con la varilla manual.
Otros ingredientes:
gusanillos de chocolate negro y blanco
4 pastillas de chocolate puro
Almíbar:
100 ml. de agua
50 g. de azúcar
coñac
Elaboración.
Ponemos un cazo al fuego con el agua y el azúcar y dejamos hervir durante cinco minutos. Añadimos un chorrito de coñác y retiramos del fuego.
Dejamos enfriar antes de utilizar.
Montaje de la tarta:
Partimos el bizocho en dos capas.
Almibaramos y rellenamos con la crema. Cubrimos la tarta con más crema.
Alrededor esparcimos los gusanillos de chocolate y por encima formamos unas lineas de chocolate unas rosetas con la nata montada con el cacao.
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